Miopía en bebés y niños pequeños.
Si bien la miopía generalmente comienza a desarrollarse entre las edades de 7 y 13 años, puede estar presente y ser diagnosticada en niños mucho más pequeños. Esta miopía de inicio temprano puede ser hereditaria, lo que significa que si uno o ambos padres son miopes, existe una mayor posibilidad de que el niño también lo sea.
Echemos un vistazo a cómo reconocer la miopía en los bebés y los niños pequeños, qué hacer si sospecha que su hijo es miope y métodos apropiados para manejar la afección según la edad .
Síntomas de la miopía en bebés y niños pequeños.
Los niños muy pequeños con miopía a menudo no saben que hay algo mal con su vista o carecen de las habilidades de comunicación para explicar los problemas de visión a sus padres. Por lo tanto, es importante observar a su hijo en sus primeros años y prestar mucha atención a los signos de miopía.
Algunos de los síntomas comunes de la miopía en bebés y niños pequeños incluyen:
- Sostiene los objetos cerca de su cara
- Se sienta muy cerca de las pantallas
- Muestra poco interés o reconocimiento de objetos en la distancia
- Entrecierra o cierra un ojo para ver mejor
- Frota frecuente los ojos
- Parpadea excesivamente
- Ojos llorosos
Si nota alguno de estos síntomas, debe reservar una cita con un profesional de cuidado de la visión.
Manejo de la miopía en bebés y niños pequeños.
Como sus ojos aún están creciendo, la miopía se desarrolla rápidamente en bebés y niños pequeños, por lo que el diagnóstico y manejo oportunos son importantes para retrasar la progresión de la afección.
Es posible que los niños pequeños no puedan explicar los problemas con su visión, por lo que es importante asegurarse de que sus ojos sean examinados regularmente por un profesional de cuidado de la visión en busca de signos de miopía y otras preocupaciones de salud ocular. Limitar el tiempo de las pantallas y alentando el tiempo al aire libre también puede ayudar a retrasar la progresión de la miopía en niños pequeños.
Los bebés y los niños pequeños con miopía generalmente se les prescriben anteojos, ya que poner y remover lentes de contacto a menudo no es factible para los niños pequeños. Mientras que algunos bebés y niños pequeños con recetas muy altas usan lentes de contacto bajo supervisión cercana de los padres, el uso de lentes de contacto se considera más comúnmente una vez que un niño alcanza la edad escolar. Los marcos de plástico con bisagras flexibles y correas elásticas son útiles para mantener los anteojos en posición y evitar daños por manos torpes.
Contenido específico de la edad para bebés y niños pequeños con miopía.
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